06 octubre 2007

POR EL AMOR DE ALÁ, ME VOLVI KITSCH Y NO ME DI CUENTA







Esto es el colmo, ¿desde cuándo la música que yo escuchaba se volvió kitsch? Ahora es el regreso de Supernova, que hace no mucho sonaban más fuerte que Don Omar, bueno, probablemente no tanto pero sí sonaban en todos lados, con esas melosas cancioncillas de patio de colegio que eran el himno de toda púber con un amor platónico. Eso fue hace siete años. Casi nada diría mi madre, lo que es completamente cierto, pero no evita el hecho de sentirme un poco vieja y sólo tengo 17, edad en que la vida recién comienza.
Quizás las agrupaciones pokemonas sólo hayan escuchado “Maldito Amor”, que incluso sirvió de nombre para ese fallido show de Jordi Castell en Chilevisión, pero no era la única, tenían unas cuantas canciones más, como “tu y yo”, mi favorita y “sin ti, soy un fantasma”, que al final del día me tenía harta, porque la gente suele abusar de las canciones más de la cuenta y las terminan agotando, lo que ocurre muchas veces con Maná porque cada vez que sacan un nuevo single uno prefiere pegarse un tiro antes de escucharlos.
Es extraño todo esto del movimiento kitsch, con sus colores locos y desempolvando clásicos que se volvieron de culto en su momento, aunque es divertido escuchar a Juan Antonio Labra a veces y recordar aquellos sábados por la mañana cuando mamá escuchaba la Pudahuel y enceraba el piso del patio. Si de aquí a dos años más van a abundar las fiestas de los noventas, en vez de la de los ochentas, deberíamos empezar a desempolvar aquellos programas y cantantes de los noventa que ya son parte del inconciente colectivo y que aún no han cobrado vida. Por ejemplo, un programa del que siempre me acuerdo y que muchos ya lo olvidaron es “Chile Tuday”, donde apareció por primera vez Nicolás Larraín, con su hermano Fernando y Felipe Izquierdo mostrando esa irreverencia media argentina que era poco conocida en este lado del continente. Me acuerdo que veía el programa entero, aunque me tuviese que despertar a las siete de la mañana al otro día y aguantar los retos de mi mamá después. El sketch que se me grabó para siempre fue la parodia de Heidi, para mí un clásico, hasta que el show llegó a su fin, como ocurre muchas veces con aquellos programas que se dedican al humor contingente y que lo intentan de la misma forma que los argentinos pero que siempre terminan mal porque en Chile, lamentablemente, no saben reírse de sí mismos y terminan todos contra el programa y llenándolo de prohibiciones absurdas. Pero no hay que preocuparse, Nicolás Larraín terminó contratado por Cuatro Cabezas y haciendo la versión chilena de Caiga Quien Caiga y el final todos lo sabemos, aunque se nota que está empezando a correr la misma suerte que su primer programa, porque ya no es igual que en sus comienzos, demasiada gente en contra. Fernando Larraín terminó de Marzo en el Santander y marcado para siempre como ‘Tito’ Larraín. Felipe Izquierdo no logró el mismo éxito, se enojó con los hermanos, terminó de mejor amigo de Cecilia Bolocco y haciendo el come back de la Elvira en Canal 13 este año, todo un ícono kitsch: la ama de casa abnegada y abusada de los noventas, claro que con una versión un poco más enchulada. Quizás como Corazones Service le hubiese ido mejor.
Creo que deberíamos reciclar a todos los personajes de programas juveniles del 2000 en adelante y reírnos de la decadencia en la que se encuentran, su Mekano kitsch (por Dios que no suceda), su Tremendo Choque kitsch (por favor que tampoco suceda), su Música Libre más kitsch que nunca y el infaltable Ballero kitsch con su “yo amo a Ballero”, la frase más ególatra y sin sentido dentro del mundillo burdo de los realities. Pero mientras tanto habría que conformarse con la vuelta de Supernova, que después de las cuatro presentaciones que tiene planificadas lo más probable es que todo esto decante en el lanzamiento de un nuevo disco.
Es el ciclo interminable del vivir del pasado, total, la televisión chilena sólo cumplió cincuenta años y aún le quedan muchos más. Así que no os preocupéis porque Diario de Eva, Buenos días a Todos y Primer Plano queda para rato. Que Dios nos guarde y nos proteja.


5 Sin Comentarios:

Anónimo dijo...

nose como se postea en esta wa xD lei todo tu testamento
sin cometarios :|
shaums ;D

panchita dijo...

Más vale tarde que nunca, XD
bueno, ya te he comentado un par de veces que me encanta tu manera de expresarte y de dejar fluir tu verdadero yo. sí porque esta es la verdadera paty!!!!.
sabes algo amiga tienes talento y mucho, llegaras lejos, te lo aseguro. :)
como sabes si alomejor eres la futura pamela jiles de iquique. akkajkajk
bueno,,, cuidate y sigue asi , que nadie te detenga.
te kiere esta pequeña que te ha aprendido a conocer y querer.
me encanta tu blog, FELICITACIONES!!!!!

blog and botox dijo...

Reivindícate, deja de ser el poser pseudointelectualoide típico de un blog, y dale rienda suelta a tu superficialidad. te invito, sino, putéame, pero haría cualquier cosa por un post porque lo que más amo en la vida es recibir toda la atención del mundo.

Saludos.

Anónimo dijo...

Me encanta lo kitsch y todo lo que provenga de él, sí, la música kitsch la llea, o sea, toda la música que en algun momento fue caquita pero que igual nos sabíamos las canciones y la bailabamos o qué se yo, ya han evolucionado y forman parte de la cultura pop, hay unos que lo hacen más rápido...DElfín, te suena?

Anónimo dijo...

IGUAL onda RENE DE LA VEGA por ejemplo no deberia ser considerado kitsch...es como na que ver, igual la musica kitsch es la musica ochentera latina no de "protesta", o sea no del rock latino, mientras unos escuchaban el rock latino, otros prendidan la radio y escuchaban a Pandora, Yuri, Daniela Romo, Mijares, Angela Carrasco, Massiel, Jose Feliciano, el Puma, y un largo etcetera.

El regreso de Supernova no lo consideraria kitsch porque duraron poco, pero si que marcaron un momento, ahora, si hubieran sacado mas discos podria haber sido todo distinto.

PATO SESNICH ESPINOZA.